Bienestar Social y Ruy López presentan el programa de clases de catellanos para alumnado inmigrante
La concejala de Bienestar Social, Isabel Ballesteros, ha acompañado a la Fundación Ruy López en la presentación del programa de clases de castellanos para el alumnado inmigrante que puso en marcha el año pasado para facilitar el acceso al castellano de estudiantes
Ballesteros ha explicado que, en una de las mesas de trabajo del Programa Migrante del año pasado, los docentes participantes comentaron su preocupación por la dificultad que presentan los hijos de los temporeros con el idioma cuando se incorporan al curso. Esto genera cierto retraso en su aprendizaje y los centros educativos no cuentan con herramientas suficientes para solucionarlo.
La Fundación Ruy López lleva trabajando desde hace años con la alfabetización de inmigrantes adultos y por ello se le propuso, desde las concejalías de Bienestar Social y Educación, abarcar ese servicio a alumnos de Primaria y Secundaria. Así, solicitaron una subvención a Diputación de Badajoz, cuya concesión ha permitido que puedan desarrollar el programa durante el último cuatrimestre del 2021.
Tras el buen resultado que ha tenido, la concejalía de Bienestar Social ha propuesto la inclusión de una ayuda a esta fundación en los presupuestos de este año para poder continuar con él.
La presidenta de Ruy López, Ana Macías, ha explicado que son los propios centros educativos los que están derivando a los alumnos, para que se les dé este apoyo escolar. “Son alumnos que acaban de llegar y no conocen bien el idioma, lo que hacemos es dar apoyo escolar en referencia al castellano para que puedan entender mejor las clases en sus centros”, ha apuntado.
Por su parte, la vicepresidenta de Ruy López, Souad Chikhaoui, ha detallado el número de alumnos de cada centro: del Montero hay 12 alumnos, del Espronceda 15, de San Francisco 5, de Santo Ángel 4, del Ortega 13, del Santiago 1, del Arroyo Harnina 7 y del Carolina 1. En total son 56. Hay varios grupos y dos niveles y las clases se dan en la sede de la Asociación de Vecinos de San José y en la sede de la Fundación Ruy López.